Extracto del Documento: Patrimonio vivo como herramienta para repensar el futuro urbano. Intercambio UCL-DPU (The Bartlett Development Planning Unit - University College London) y el Centro de Desarrollo Cultural de Moravia.
“La sociedad considera que el desperdicio es un asunto privado de alcance público. La basura ha sido distanciada y reprimida, sin embargo, da forma a nuestras vidas y paisajes”. (Engler, 2004, p.xv).
La basura se convirtió en un problema a raíz de los procesos de industrialización y urbanización y, por lo tanto, desde hace dos siglos se han establecido procesos de control y eliminación de residuos en los ámbitos públicos y privados (Engler, 2004). Desde el campo de la arquitectura del paisaje, Mira Engler (2004) investiga los residuos desde una perspectiva multi-escalar: desde el hogar, el barrio, la ciudad y la región. Su estudio se centra en los paisajes privados y públicos de residuos y, en particular, en los paisajes públicos marginales de residuos. Ella hace frente al supuesto de que los paisajes de residuos son sitios inherentemente inferiores, concibiendo, por el contrario, los territorios de residuos que han sido marginados como espacios desafiantes con un rico significado cultural que pueden constituir una oportunidad potencial para la transformación social y ecológica:
“A veces, su naturaleza inquietante, impredecible y dinámica los convierte en un paisaje de desechos contemporáneo (…) otras veces, [los paisajes de residuos] se convierten en espacios públicos y jardines contemporáneos, fuentes de información, puntos de conexión con el medio ambiente o centros de programas sociales y de activismo”. (Engler, 2004, p.xv)
El territorio de Moravia fue durante muchos años el depositario de los residuos de Medellín y, como tal, la identidad del barrio estuvo estrechamente asociada a su vertedero de basura. Desde la década de los sesenta, la basura se depositaba en el área de El Bosque de Moravia y era considerada como la forma de subsistencia económica de los habitantes, que trabajaban reciclando materiales de la misma. Con la canalización del río en la década de 1970, el antiguo cauce del río, comenzó a ser utilizado como un espacio para arrojar basura también. La creación del Morro, una colina de residuos en el centro de Moravia, consolidó la asociación del territorio con un paisaje de residuos. Entre 1977 y 1984 la montaña de residuos superó los 30 metros de altura alcanzando una extensión de siete hectáreas de terreno. Para entonces, el reciclaje era una tradición aprendida y realizada como actividad económica por los residentes, conocidos como basuriegos. Las familias de basuriegos terminaron creando una exitosa cooperativa de reciclaje conocida como ´Recuperar´ (Alcaldía de Medellín, 2005). Sin embargo, en 1984 se cerró el basurero y en 1990 se designó Moravia como área de intervención especial. El Morro fue declarado zona de calamidad pública debido a la inestabilidad del suelo y a los gases tóxicos y lixiviados que emanan del mismo. El plan parcial de mejoramiento integral surgió en el 2004 cuando 800 familias que antes vivían en el Morro fueron reubicadas y el Morro fue convertido en un jardín de plantas ornamentales para mitigar los efectos tóxicos de la basura enterrada.
Los medios de vida de las comunidades de Moravia se activan en torno al medio ambiente como un medio para asegurar su subsistencia económica. Sin embargo, la gestión de residuos sigue siendo un problema de los barrios y un tema crítico en términos de coexistencia. Además, la contaminación de la Quebrada La Bermejala, que atraviesa la Comuna 4 y el barrio de Moravia, desde Carabobo hasta el río, es un problema. Palo de lluvia es el programa de educación ambiental del CDCM que busca contribuir al fortalecimiento de los procesos de educación ambiental y participación social de las comunidades que conforman las guarderías e instituciones educativas de la Comuna 4 de Medellín. Este programa se ha extendido a una comunidad más amplia, a partir de la comprensión de la necesidad permanente de vincular lo cultural con lo ecológico. Para el año 2020 el CDCM prioriza la estrategia de Gestión Integral de Residuos como parte de su trabajo de vinculación social.